La Policía Federal Argentina, a través de su división antiterrorismo, detuvo a dos personas en Mendoza bajo sospecha de estar involucradas en actividades terroristas. La detención se llevó a cabo tras una minuciosa investigación que apuntaba a la financiación y captación de personas para su radicalización en la provincia.
Los sospechosos fueron capturados en una serie de allanamientos que también resultaron en el secuestro de un arsenal que incluía cuchillos, revólveres, 14 pistolas, teléfonos celulares y computadoras, las cuales serán sometidas a peritajes. Las autoridades han señalado que los detenidos estarían involucrados en el ingreso de extranjeros vinculados a una presunta célula islámica, con planes de perpetrar atentados contra instituciones católicas en el departamento de Rivadavia.
Esta operación, encabezada por el fiscal Fernando Alcaraz, se inició hace un año tras recibir mensajes que advertían sobre un posible atentado. «Son fanáticos que financian y captan a personas en proceso de conversión religiosa para radicalizarlas», revelaron fuentes cercanas a la investigación.
Se trata de un caso sin precedentes en Mendoza, lo que subraya la importancia de las detenciones. Sin embargo, la investigación no ha concluido. Las fuerzas de seguridad continúan la búsqueda de un tercer sospechoso, quien ya ha sido identificado y expulsado por la comunidad islámica en Uruguay debido a sus actividades radicales.
Este hecho resalta la creciente preocupación por la seguridad en la región y la necesidad de una vigilancia constante ante la amenaza del extremismo. La comunidad local sigue atenta a los avances de la investigación mientras las autoridades intensifican los esfuerzos para garantizar la seguridad en la provincia.